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Considera “curioso” que en todo el procedimiento desde la Sindicatura hasta la Consejería de Bienestar nadie hubiese hecho alegaciones

Ángel González, portavoz parlamentario de IU, acudió esta mañana “con tranquilidad y normalidad” al Tribunal Superior de Justicia para declarar sobre su imputación por la contratación de monolitos. A juicio del diputado, que estuvo acompañado de la abogada Ana García Botto, la declaración le permitió llegar a los detalles del proceso de esta contratación. En declaraciones a los medios tras prestar declaración, González insistió en que “ni era mi función ni lo hice nunca decidir qué procedimiento había que hacer, por mucho que lo afirme quien lo afirme”. El diputado testificó que nunca realizó ninguna advertencia ni verbal ni escrita a la funcionaria que declaró que había sido advertido de la irregularidad del contrato de obra por valor de 50.000 euros para señalizar las fosas del franquismo y que ante ,”cualquier aviso aunque fuera verbal lo hubiese corregido inmediatamente”. En este sentido explicó que el objetivo era iniciar la colocación de los monolitos, sabiendo que esto lleva meses, incluso años, “porque son muchas y en sitios difíciles y si se hubiera advertido algo, hubiésemos contratado un número menor o una por una, porque ese no era el problema y tampoco el del presupuesto”. “Nuestra obligación era cumplir la ley de memoria histórica, investigar, proteger y señalizar las fosas en cumplimiento de la ley”, dijo el diputado.

Más de una semana después de su imputación, González reiteró en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, y después de “estudiarlo”, que estamos hablando de contratos de obra, que tienen como tope 50.000 euros, IVA no incluido. “Es una obra que empieza por buscar una roca, darle forma, ponerle la placa, cargarla en una grúa para llevarla, instalarla. … eso es una obra continuada. Es una cuestión técnica de discusión e interpretación de la contratación”. El diputado advirtió que “de afirmaciones falsas en una declaración de una funcionaria, o de una persona, se derive una acusación de una persona, en este caso a mí, o a cualquier otra... es muy peligroso para todo el mundo”. Así explicó que “en derecho administrativo es obligatorio que haya un papel, que haya constancia, para poder contrastar con otro técnico. Eso indica que, por los motivos que sean, no se advirtió y si eso no se advirtió nadie puede acusarnos de hacer una cosa a sabiendas, que es lo que es prevaricación, hacer una cosa a sabiendas de su ilegalidad, sabiendo que es injusta. ¿Cuál es el interés, el móvil?, aquí nadie alude a cuestiones de las empresas ni tiene nada que ver con esto. Yo espero que con esta explicación pueda ser suficiente para que se estime que no han ningún atisbo de prevaricación, sino una decisión política”.

El diputado también calificó de “curioso” que en todo este proceso, desde octubre de 2011 hasta ahora, desde su inicio en la Sindicatura, pasando por el Tribunal de Cuentas “•nadie nos haya dicho nada ni nos haya consultado nada para que nos explicásemos”. “No es reprochar nada a nadie, pero a lo mejor, si hubiésemos hecho alegaciones como lo hicieron en otras consejerías, a lo mejor no estábamos aquí”, aseguró. La Sindicatura de cuentas hace el informe provisional del 2010 de todas las consejerías y lo envía para hacer alegaciones, “curiosamente esta consejería no hizo ninguna alegación ni nos llamaron ni nos dijeron nada ni contestaron nada, después el Tribunal de Cuentas se dirige a las consejerías, dos de ellas contestan y lo archivan, y Bienestar Social tampoco contesta y ya había un nuevo secretario general técnico y un nuevo gobierno, que es el que está ahora y tampoco contesta”. “Si por dos veces nadie tiene nada que alegar, el Fiscal del Tribunal de Cuentas lo manda aquí a la Fiscalía”, relató.

A preguntas de los periodistas sobre el Consejo Político de IU que se celebrará el jueves, el portavoz parlamentario aseguró que es muy importante que los miembros del mismo, casi dos centenares de personas, puedan conocer todo esto para poner en claro qué hay detrás. “Desde la dirección lo que vamos a explicar es que, de ninguna manera, puede meterse todo en el mismo saco e IU haría muy mal si se mete ella misma en el mismo saco que otros”, explicó. En el Consejo Político, continuó González, va a quedar claro que los planteamientos de algunos compañeros es el de la no superación de la asamblea del año pasado. “Creo que esta organización está trabajando bien, hay cambios positivos y hay que seguir trabajando. Probablemente no haya mal que por bien no venga y creo que esto contribuirá a superar las tres candidaturas, concluyó”.