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Ángela Vallina firma junto con otros miembros de la delegación de Relaciones con Palestina una carta que reclama la intermediación con Israel de la Alta Representante de la UE. “Estos terrenos son palestinos y expulsar a sus poblaciones contraviene la IV Convención de Ginebra”, denuncia.

La eurodiputada de Izquierda Unida Ángela Vallina ha firmado una carta junto con varios miembros de la delegación del Parlamento Europeo para las Relaciones con Palestina, en la que exige a la Alta Representante de la Unión Europea, Federica Mogherini, que “intervenga de forma decidida con las autoridades israelíes” para evitar que se cumplan las 42 órdenes de demolición emitidas por el Gobierno de Israel en Khan Al Amar, población con una comunidad beduina importante, en el Área C de Palestina.
 
En esta carta, los miembros de la delegación sostienen que la UE no puede “echarse a un lado” mientras esta comunidad, “en la que la más de la mitad son menores de edad que ya viven en condiciones muy precarias”, es obligada a demoler sus propias casas “en un claro intento por forzarlos a irse de esta zona, que constituye un área esencial para asegurar la contigüidad del Estado palestino”, y que, además, supondrá un paso más “en la expansión de los asentamientos ilegales”.
 
“En nuestra visita a la zona el mes pasado, tuvimos ocasión de conocer de primera mano los planes israelíes de demolición, que incluyen demoler una escuela pagada con fondos de la UE y observamos cómo el Gobierno de Israel, con estos asentamientos ilegales, está cambiando toda la fisonomía de Cisjordania y expulsando a la población palestina de sus casas”, denuncia Vallina.
 
Tal y como refleja la carta, Vallina explica que “esta expulsión violaría la IV Convención de Ginebra y no está justificada”. La misiva recuerda, asimismo, que “el desplazamiento forzado de población constituye un crimen contra la humanidad según el Estatuto de Roma”. “La UE debe demostrar a las autoridades israelíes que es un pilar esencial del orden internacional y que está decidida a defenderlo, sin permanecer al margen mientras se producen con total impunidad este tipo de violaciones del derecho internacional”, añade.
 
En este sentido, Vallina alerta de que “este plan sistemático del Gobierno de Israel, de apropiarse ilegalmente de terrenos que pertenecen al pueblo palestino forma parte de su política de apartheid y además pone en grave riesgo la solución de los dos Estados”.
 
La eurodiputada ha recordado que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina denunció a finales de febrero las órdenes de demolición dadas por el Gobierno israelí. “Prohíben construir nuevas casas, hacen demoler otras, y desde el 6 de febrero de este año el Parlamento israelí ha legalizado 4.000 asentamientos ilegales de colonos judíos”, indica.
 
“La UE está obligada a hacer cumplir a Israel los estándares y valores sobre los que se ha construido la propia Unión”, continúa la carta de los eurodiputados de la delegación, en la que se critica con dureza la decisión del Consejo de Asuntos Exteriores de la UE de empezar a preparar el Consejo de Asociación con Israel.
 
La situación “es insostenible. La UE no puede mantener abierto el acuerdo de asociación con Israel”, indica Vallina, que además exige al Gobierno de España que “reconozca el Estado palestino”, como muestra de que “tiene una voluntad real de apoyar la solución de los dos Estados”.
 
“Esta delegación está firmemente convencida de que la UE no puede profundizar en las relaciones con Israel y al mismo tiempo condenar los asentamientos ilegales y las demoliciones. Debemos ser coherentes con nuestras acciones y obligar a Israel a respetar el derecho internacional en los territorios ocupados de Palestina y los derechos humanos de los palestinos”, concluye el texto de la carta.