La puerta de atrás de la incineración de residuos
31 de mayo de 2012
En su informe la organización evidencia la inviabilidad económica y ambiental de la quema de los combustibles derivados de residuos (CDR)
ECOticias.com
Greenpeace ha presentado el informe La puerta de atrás de la incineración de residuos. Análisis económico ambiental de la utilización de combustibles derivados de los residuos (CDR) en España (1), en el que se exponen los elevados costes que tiene la quema de este tipo de basuras. La producción de CDR a partir de residuos municipales constituye una alteración de la jerarquÃa de residuos y el desaprovechamiento de una gran cantidad de materiales recuperables valiosos ya que los destina, bajo el nombre de combustibles, a incineración.
Los datos aportados por el Instituto Nacional de EstadÃstica (INE) en su última Encuesta sobre la Recogida y Tratamiento de Residuos indican que más de un 88 % de nuestras basuras urbanas se recogen de forma mezclada. Esto hace que nuestro paÃs esté por debajo de los niveles de recuperación que fija Bruselas. A pesar de ello, y de que varias comunidades autónomas (CC. AA) hayan descartado proyectos para construir o ampliar incineradoras (Catalunya y Navarra) sus responsables polÃticos y técnicos pretenden desviar el flujo de residuos a quemar hacia otro tipo de hornos como cementeras o plantas de generación de electricidad, entre otros.
El estudio desgrana información de las caracterÃsticas, la legislación aplicable, la situación en Europa y España, y un análisis del impacto económico y ambiental del uso de CDR por parte de la industria. Estos dos últimos puntos son especialmente relevantes pues destacan los altos costes económicos y medioambientales negativos para el conjunto de la sociedad, ya que solo representa beneficios económicos para las instalaciones industriales que los consumen.
Según revela el informe, dado que los CDR contienen un elevado porcentaje de residuos potencialmente reciclables, si los residuos consumidos como CDR en España el año 2010 se hubieran destinado a reciclaje se hubieran generado beneficios externos por valor de entre 7,1 y 7,7 millones de euros. Además de este beneficio no generado, el consumo de CDR en cementeras tuvo un coste externo de entre 1,33 y 2,41 millones de euros en el año 2010. Claramente, el beneficio serÃa mayor con una gestión más racional y sostenible de los residuos.