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Alberto Tirador aboga por la corresponsabilidad, no por la imposición, y reivindica que los fondos no pueden emplearse para gastos generales del Estado, para los que existen otros mecanismos financieros

Izquierda Unida exigió hoy que cualquier medida que se adopte sobre el superávit municipal se realice previa negociación y consenso de los ayuntamientos. El secretario de Política Municipal, Alberto Tirador, aseguró hoy, en relación a la posibilidad de que el Ministerio de Hacienda pretenda utilizar estos fondos, que esta decisión no puede plantearse al margen de las propios ayuntamientos. Tirador precisó que sobre el asunto la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) no tiene en estos momentos ningún conocimiento ni oficial ni oficioso. De todos modos, añadió el también alcalde de Illas, "nada se debe ni se puede hacer al margen de los propios municipios; creo que tenemos, primero, que reconocer que éstos son una parte importante de la Administración y como tal tienen que ser tratados; segundo, esos fondos que llevamos mucho tiempo reclamando desde los propios ayuntamientos, tienen que ser destinados a los propios municipios y en labores de fomento de la inversión y por tanto económicas".

Para IU, el superávit municipal no debe emplearse para gastos generales del Estado. Para eso, enfatizó Tirador, "debe usarse la deuda y el amplio margen fiscal que hay en España para con las grandes fortunas y, por supuesto, un buen acuerdo con Europa"

Alberto Tirador advirtió también de la necesidad de tener muy en cuenta la situación demográfica española, con zonas muy urbanizadas y pobladas y auténticos desiertos demográficos. En este sentido, aseguró que es necesario evitar que se acentúen las diferencias entre la España rural y la urbana. "Si se estrangulan los ayuntamientos se contribuye a aumentar más la brecha de la España vaciada".

En cualquier caso, explicó el responsable de Política Municipal de IU Asturias, "no se puede tirar de ese dinero para pagar gastos estatales o hacer caja común. No hablamos de ser insolidarios, sino de ser corresponsables. Y, en esa corresponsabilidad, no se puede imponer a ninguna administración planteamientos sin negociación de ningún tipo. El objetivo tiene que ser la ciudadanía".

Alberto Tirador recordó que lo que existe es un estado de alarma pero no una suspensión de la democracia ni, añadió, "del respeto constitucional a una parte del estado que no es menor de edad".