Ángela Vallina advierte que su grupo parlamentario no acompañará al Gobierno si se aleja de la hoja de ruta de investidura por caer en una deriva hacia la derecha
Izquierda Unida ha hecho hoy un llamamiento para acabar la legislatura con un nuevo escenario político en el que las fuerzas progresistas lleguen a acuerdos y al conjunto de la Cámara para bajar el tono, evitando los discursos del "odio". La portavoz de la formación Ángela Vallina, tras una intervención en la que ha rechazado los pactos de geometría variable que incluyan innecesariamente a fuerzas de derechas, quiso aprovechar la ocasión para defender la necesidad del entendimiento de grupos de la izquierda que, ha enfatizado, "reforzaría en este tramo final de la legislatura tanto la orientación progresista de la acción de gobierno como el cumplimiento de los objetivos expresados en el debate de investidura; permitiría alinear definitivamente nuestra Comunidad Autónoma a la estrategia política estatal y, sobre todo, eliminaría cualquier excusa que alguno pudiera tener para profundizar en la geometría variable, pensando que así se le allana el camino para una holgada victoria electoral futura sin tener en cuenta que este tipo de previsiones las acaba cargando el diablo".
Y es que, ha recalcado Ángela Vallina, "en este Parlamento, hay 26 diputadas y diputados adscritos a ese espacio que tradicionalmente se ha venido llamando la izquierda, lo cual constituye una mayoría abrumadora. Sin embargo, esa mayoría parlamentaria no se ha venido traduciendo en una mayoría política que sustente un Gobierno comprometido en un programa indiscutiblemente progresista. Esa anomalía, que se viene arrastrando desde antes del inicio de la legislatura, acabó provocando que no se haya podido aprobar un presupuesto exclusivamente de la izquierda, que hubiera hecho prescindible la intervención de ningún grupo de la derecha y, de paso, evitando que el Gobierno cayese en la tentación de ejercer la geometría variable, como pasó en Gijón, sin ir más lejos".
Para IU, ha explicado su portavoz parlamentaria, la geometría variable, cuando existe una nítida mayoría de izquierda, "sólo sirve para introducir confusión en la acción política y escepticismo y desafección en la ciudadanía, que ve cómo los programas son prescindibles y los principios mutables en función de la coyuntura. Y, sin embargo, lo que quieren los asturianos y las asturianas es justamente lo: contrario seriedad y coherencia. Y que se llame a las cosas, sin vueltas ni eufemismos: izquierda a la izquierda y derecha a la derecha y, sobre todo, hechos y no palabras vacías".
Como efecto inmediato de la geometría variable, ha lamentado Vallina, al final, se acaban incorporando a los presupuestos elementos que implican ya de por sí un peligroso deslizamiento del Gobierno hacia la derecha, y que, además, responden al interés particular de ciertos grupos de presión bien conocidos, aprovechándose de la desintegración de algún grupo de la derecha. Eso, quiero decirlo con total claridad, nos hace temer que el Gobierno se aleje irremediablemente del camino que trazó en su inicio. Desde luego, si finalmente se concreta ese giro, yo tengo que decir desde este momento que nuestro grupo no le acompañará en esa deriva".
Durante el Pleno de Presupuestos, la diputada ha censurado la deriva populista en la que están cayendo parte de los grupos políticos asturianos y ha alertado de la necesidad de recuperar un clima alejado de la confrontación. "Recuperemos la normalidad, el talante y dejemos la bronca que es lo que menos necesita Asturias en estos momentos", ha pedido Vallina.
En cualquier caso, Vallina ha pedido como deseo para 2022 que el nuevo año "nos evite estos discursos de odio, estas confrontaciones".
Diputáu Autonómicu y Coordinador d'IX
Diputado Autonómico
(Mas Asturies)
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Convocatoria por Asturies