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El diputado critica la ley mordaza que demuestra, asegura, la debilidad del PP y el miedo a que la gente haga política

Manuel González Orviz ejemplifica en la manifestación de ayer de Avilés la respuesta de la sociedad que el Gobierno de Rajoy trata de acallar.

El candidato y diputado nacional de IU, Alberto Garzón, aseguró hoy que el PP no tiene capacidad para buscar consensos y que su única alternativa para intentar mantenerse en el poder es la coerción. Esa situación explica, dijo, la propuesta y aprobación de la denominada Ley Mordaza, una regulación con la que pretende parar, por la vía de la represión, la contestación social a unas políticas que, añadió, solo están beneficiando a la minoría económica más pudiente. Garzón, que reivindicó la necesidad de una gran coalición de fuerzas de izquierdas, aseguró que esta ley es “el reflejo de la debilidad del Gobierno del Partido Popular, de la extrema debilidad del Partido Popular, no solo porque lo haya aprobado en solitario, con la oposición de todos los demás grupos parlamentarios sino, muy especialmente, porque deja entrever que el PP ya no puede convencer a la ciudadanía con argumentos”.

La ley es un nuevo paso en la política de represión llevada a cabo por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, algo que se demuestra por las causas abiertas con el objetivo de debilitar la contestación a sus políticas. “Nunca, en este país, se había visto desde hace tantos y tantos años  tantos sindicalistas pasar por los juzgados y tantos sindicalistas pasar por las cárceles”.

Y esa respuesta para generar miedo en la población está ligada, directamente, a la lógica del PP para quien, explicó, “su principal adversario, el principal adversario de las políticas neoliberales de recortes de las conquistas sociales es la izquierda organizada, los sindicatos organizados y los activistas sociales. El PP tiene miedo a que la gente se movilice, que la gente haga política al margen de las instituciones”. Frente a ello, Alberto Garzón aseguró que una de las prioridades de IU es movilizar a la población: “tenemos muy claro que la gente tiene la llave para abrir las instituciones para que entre la democracia en el Congreso, y tenemos muy claro que el instrumento para la transformación social es la movilización social. Es decir, el politizar a la gente; que la gente no crea que votar cada 4 años es la definición estricta de democracia. En realidad, política y democracia significa hacer política y activismo social continuamente”.

El coordinador general de IU Asturias, Manuel González Orviz, ejemplificó esa voluntad de resistencia a las políticas neoliberales de recortes en la manifestación vivida ayer en Avilés. “Una gran movilización en defensa de los derechos laborales de los trabajadores de Alcoa que corren el riesgo de ser despedidos como consecuencia de decisiones políticas, de decisiones económicas que toma el Gobierno de la nación, privilegiando a las eléctricas y en un momento en que, curiosamente, el Parlamento estaba aprobando una ley que lo que pretende es cerrar el círculo del proceso que se abrió con la reforma del artículo 135 de la Constitución española: ayer se daba carta de naturaleza a lo que era la represión de las movilizaciones, pero también estaba el ejemplo, ayer en la calle, de que el conjunto de los trabajadores, de la ciudadanía, la izquierda social, la izquierda alternativa, vamos a estar combatiendo por lo que es la defensa de los derechos democráticos, sociales y de las libertades”.

Para Alberto Garzón, las próximas citas electorales autonómicas y municipales son hitos que están dejando entrever el miedo del Gobierno y de los grupos de poder. “Este PP asustado por el poder de la gente en realidad se encuentra también asutado de la posibilidad de que la izquierda consiga apuntalar un movimiento de unidad popular. Este país se merece por fin un gobierno de izquierda”.

Respecto a las alianzas, el diputado aseguró que es imprescindible y que IU lleva una larga trayectoria que empieza por el propio nombre de la formación. En este sentido, recordó que ya para las Europeas, bajo el mismo estandarte concurrían 12 organizaciones de izquierda y, ahora, lo que es imprescindible es encontrar esa confluencia para llegar al poder y plantar cara a las políticas de recortes. “La unidad de la izquierda se construye con la gente y para la gente. No necesita que haya nadie diciendo venir a mi casa común a resolver aquí las necesidades de la gente. Nosotros hemos hecho, desde hace ya mucho tiempo, un ofrecimiento a dedicar nuestras energías, nuestro esfuerzos, nuestros cuadros, nuestros experiencia al propósisto de transformar el país”.

Para Garzón, la sociedad tiene una “oportunidad histórica” en tanto que el bipartidismo nunca ha estado tan bajo. Respecto a la fuerza emergente, el diputado señaló que la decisión de llegar a acuerdos depende de ellos. “De momento, hay un actor relevante, que es Podemos, que ha manifestado que no va a acudir de forma conjunta a las autonómicas ni a las generales y que en las municipales no se presenta y que lo va a hacer de forma autónoma y con independencia del resto de organizaciones de la izquierda.

En ese caso, será Podemos quien tenga que explicarle a la gente por qué en un momento histórico han prescindido de la herramienta de la unidad popular y prefieren caminar de forma autónoma en vez de sumar fuerzas, cuando creo que la historia refleja que unidos somos más fuertes, en torno a un programa político, al margen de las diferencias que puedan existir”.

Respecto a las coincidencias programáticas, Garzón señaló que, aunque en un primer momento había grandes puntos en común, en estos momentos, la nueva fuerza está orientando su discurso a ámbitos de amplio espectro ideológico. “Nuestra hoja de ruta es clara. Entendemos la convergencia desde el lado de la convicción, no del oportunismo y, en ese sentido, vamos a continuar al margen de que otras fuerzas no quieran participar”.

En cualquier caso, Alberto Garzón matizó que el propósito de IU no es llegar a acuerdos con fuerzas concretas, sino con el máximo número de actores políticos de la izquierda. “Sabemos por pronunciamientos públicos por parte de dirigentes de Podemos -Rafa Mayoral lo manifestó en una rueda de prensa- que a las elecciones generales se van a presentar solos. Si ellos cambian esta opción, creo que sería bueno para la sociedad que entre todas las fuerzas de la izquierda construyamos una unidad popular”.