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Izquierda Unida hace un llamamiento a los partidos democráticos para frenar los discursos del "odio" y hacer "muro" frente a ideologías que hace 86 años promovieron el asesinato de García Lorca por "rojo y por maricón"

La portavoz de Izquierda Unida. Ángela Vallina, ha denunciado hoy el auge de ideologías de "odio" hacia colectivos vulnerables y el contagio de algunas fuerzas políticas que ceden a la presión de la ultraderecha. La diputada puso como ejemplo la comunidad madrileña que ha pasado de ser un vanguardia en diversidad sexual a convertirse en uno de los ejemplos de la involución, fruto del seguidismo. "Acabamos de ver cómo Madrid no va a poner la bandera LGTBI, ¡qué vergüenza".

Y es que esta mañana la Junta debatía una Proposición no de Ley de Foro Asturias sobre adopción de medidas en favor del colectivo LGTBI, una iniciativa, a juicio de Vallina, que llega en el momento oportuno y en el marco del día del Orgullo.

Ángela Vallina arrancó su intervención arremetiendo contra la diputada ultraderechista Sara Rouco: "ni feminismo radical, ni el otro invento de feminismo liberal, feminismo, puro y duro. ¿Sabe usted lo que significa feminismo? I-gual-dad. Y punto; no le pongan calificativos. No inventen. No inventen lenguajes ni nuevas versiones de todo".

La parlamentaria recordó que los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y en derechos, sin distinción alguna. Por eso, ha remarcado, "las personas LGTBI tienen los mismos derechos que las personas que no lo son. Es lo propio de una sociedad diversa y respetuosa con la diversidad de género, capaz de erradicar el odio y las discriminaciones, para seguir profundizando en la democracia y sus derechos. De una sociedad digna, en definitiva".

El problema en estos momentos es la ocupación del espacio público y mediático de discursos de quienes cuestionan y desprecian los valores de la igualdad y tolerancia que, ha enfatizado Vallina, "según sus reflexiones ponzoñosas, es la expresión de una supuesta decadencia social y cultural". Lo peor, ha señalado la diputada, es que ese tipo de planteamientos discriminatorios que desprecian al diferente no son nuevos. "Hace exactamente ochenta y seis años, casi un siglo, los padres de esa ideología de odio asesinaron a García Lorca por rojo y por maricón. Por eso, las fuerzas políticas democráticas tenemos la obligación frenar estos discursos del odio que desde hace algún tiempo se vienen escuchado, haciendo muro para concienciar a la sociedad para que todas las personas sin importar su identidad o su orientación sexual puedan ejercer, sin miedo y con respeto, todas las facultades y derechos que les corresponden como ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho".