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El secretario general de la organización campesina, junto a Ovidio Zapico y Nuria Rodríguez, creen que la modificación legislativa acarreará consecuencias negativas para el medio rural asturiano y sus sectores tradicionales

La Ley de Calidad Ambiental ha sumado hoy un nuevo actor en contra, que refuerza los apoyos de cara a la presentación, en septiembre, de la enmienda a la totalidad. A grupos ecologistas y conservacionistas, ayuntamientos, sector pesquero, y el sindicato Comisiones Obreras, se añade ahora el medio rural, que ve en la norma un nuevo ataque a los modelos tradicionales de actividad de la Asturias Vaciada. El diputado y coordinador general de IU, Ovidio Zapico, la parlamentaria de Podemos Asturies, y el secretario general de la Unión de Campesinos Asturianos (UCA), José Ramón García Alba "Pachón", ha insistido hoy en la necesidad de cambios en la forma y en el fondo de esta modificación legislativa.

Zapico ha explicado que IU seguirá buscando "aliados" contra la ley Cofiño, al entender que es "lesiva" para los intereses generales y que sólo busca satisfacer "intereses muy concretos de sectores muy concretos". La coartada del Gobierno para justificar la necesidad de la reforma en un aligeramiento de la "burocracia" es, a juicio del diputado, una mala excusa, toda vez que sólo facilita la tramitación en sectores dominados por grandes empresas, pero no para la ciudadanía. De hecho, los cambios que se pretenden, con una relajación de los controles, ha alertado el diputado, "van a abrir la puerta, si no lo remediamos, al modelo de ganadería intensivo en nuestra Comunidad Autónoma". Y no es el único efecto negativo, ya que además es previsible un aumento de la litigiosidad: "pongamos como ejemplo ese supuesto caso de una granja con 600 gochos. A ver quién es el vecino o vecina que no va a empezar a poner denuncias contra el correspondiente ayuntamiento cuando empiece a dar malos olores, cuando empiece a haber moscas...".

Pero, entre los peligros, la Ley Cofiño supone también un claro riesgo al facilitar la instalación de parques eólicos, con una incidencia "severa" sobre el sector ganadero tradicional, especialmente, en el occidente de Asturias. "Resta superficie, todo lo que tiene que ver con los viales, de la política agraria comunitaria; resta quinientos metros a cada lado de la ladera de servidumbre para aprovechamiento para los pueblos aledaños; genera incomodidades al ganado, en cuanto a acceso a pastos, a puntos de agua, a zonas llanas de descanso. Y, con esta ley, todo eso va a tener un discurrir mucho más fácil".

En este contexto, ha enfatizado Zapico, "tanto nosotros, como el grupo parlamentario de Podemos Asturies entendemos que no hay otra solución que no sea la retirada de esta ley y emplazamos, una vez más, al Gobierno del Principado y al señor Cofiño (Juan, vicepresidente de Asturias) a retirar la ley y a no buscar excusas y argumentos que, muchas veces, caen por su propio peso cuando intentan contrarrestar lo que nosotros decimos". Frente a ello, ha reivindicado el coordinador general de IU una nueva propuesta que debe contar con el consenso necesario y una mayoría social.

El secretario general de UCA ha recordado que su organización lleva mucho tiempo levantando la voz contra instalaciones que están poniendo en peligro el sector agroganadero tradicional, como los parques eólicos, cuyas servidumbres no sólo suponen una pérdida importante de terrenos hasta ahora incluidos como supèrficie susceptible de recibir las ayudas de la PAC, sino también de otras actividades complementarias de tipo forestal, que deberán desaparecen en los márgenes de los aerogeneradores. Y, por si fuera poco, también llegan para entorpecer los tránsitos de la cabaña unos viales de una anchura de entre ocho y nueve metros, con unos taludes que, ha asegurado, "interrumpen" el paso normal del ganado de una parte a otra, algo que debe tenerse en cuenta, dado que en la sierra el agua es un bien escaso.

Otro problema que, salvo excepciones no se maneja, es el de los incendios que se producen en las zonas de torres eólicas por la caída de rayos. En este sentido, Pachón ha puesto como ejemplo los fuegos que se produjeron recientemente en la zona de Villayón. "Eso parece ser que no molesta a nadie: esto pues pasa desapercibido". Por el contrario, José Ramón García Alba ha contrapuesto qué hubiera pasado si el incendio se hubiera producido como consecuencia de una actividad de un ganadero: "tendría una sanción por daños al suelo, por el coste de la extinción del incendio y para recuperación del suelo. Que yo sepa, ahora mismo, no hay ningún expediente abierto por esta razón cuando los medios de extinción llegaron a la conclusión de que fuera un rayo a través de una torre". En definitiva, ha asegurado, la ley permitirá que no se mida a todo el mundo "por el mismo rasero".

Para el secretario general de UCA la Ley Cofiño dota de "un privilegio" a ciertas empresas que consideran estratégicas y que imponen sus intereses a pesar del daño que se provoca al medio rural. Según José Ramón García Alba, en aquellas instalaciones eólicas indispensables que no quede otro remedio que levantar, lo lógico, es que la rentabilidad tuviera un impacto en la propia zona, en los pueblos afectados, algo que, ha reprochado, no sucede ahora.

La diputada de Podemos, Nuria Rodríguez, ha calificado la nueva norma de "barra libre" para que "cualquiera que quiera montar lo que quiera, donde quiera, simplemente con una declaración responsable". El impacto ha suscitado el rechazo de sectores tan dispares como el ganadero, el pesquero o el sindical, así como el de más de 30 organizaciones ecologistas y conservacionistas, ha recordado la parlamentaria. En este contexto, la duda que se suscita, es: "por qué el PSOE se empeña en favorecer a un solo sector frente a todos los sectores sociales que están en contra de esta ley de calidad ambiental que, insisto, no tiene precedentes, prácticamente en ningún sitio europeo".

Menos diez al Gobierno asturiano en conservación de la biodiversidad

Nuria Rodríguez ha querido calificar la acción en materia medioambiental del Gobierno con un cero que, finalmente, ha convertido en un "menos diez", al considerar que no está a la altura de lo necesario para garantizar la conservación de la biodiversidad ni, tampoco, en la defensa de los sectores productivos tradicionales, de los que dependen, en buena parte, la gestión del territorio de la Asturias Vaciada. De hecho, la Ley de Calidad Ambiental repercutirá negativamente a esas actividades sino que contribuirá, ha asegurado, a su desaparición.

IU y Podemos, ha anunciado Rodríguez, seguirán trabajando para ampliar la base social de rechazo a la Ley Cofiño: "no hemos parado un solo día en este verano; vamos a seguir sumando; estamos en conversaciones con más sectores". La diputada se ha mostrado convencida de que, en septiembre, el Gobierno de Asturias estará aún más solo.